Basándome en una traducción literal del portugués de la preciosa canción de Acuarela de Toquinho, he hecho la mia propia (*).
Espero recoger el mensaje original con el mayor de los respetos para el artista y para que todo el mundo la disfrute como se merece.
En un papel cualquiera dibujo un sol amarillo,
y con cinco o seis líneas fácilmente tengo un castillo.
Si repaso mi mano con delicadeza hago un guante
y si llueve una piedra será un parasol elegante.
Si una gota de tinta pongo en un papel azulado,
se convierte en gaviota que vuela radiante y que lejos va.
«Va volando rodeando la gran curva Norte Sur»,
voy con ella, viajando desde el Cabo hasta Istanbul.
Pinto un barco con una gran vela blanca que surca las aguas del inmenso azul.
Miro al cielo, entre las nubes, un avión lleno de luz
vuela alto, paseando gente alegre como tú
descubriendo todo un universo hasta que llega el momento de dejarlo atrás,
de dejarlo atrás.
En una hoja dibujo un barco que sale del puerto,
junto a buenos amigos viviendo feliz el momento.
De una América a otra consigo pasar al segundo,
solo giro el compás si quiero recorrer todo el mundo.
Un niño que camina y se encuentra de frente un gran muro,
lo podrá sortear con la ayuda de gente que en lucha está.
El futuro es una nave que intentamos pilotar,
de repente vuela alto, otras veces quieta está,
dirige su rumbo donde le parece sin tener en cuenta lo que sentirás.
Donde vaya, no está al alcance del deseo o la ansiedad,
nadie sabe hacia donde el recorrido le llevará.
Viajemos unidos en este camino que cual acuarela un día se borrará, un día se borrará.
Como el sol amarillo pintado sobre el papel fino,
un día se borrará.
Como el lindo castillo que hiciste tal vez para un niño,
un día se borrará.
Como el círculo grande que al son del compás muestra el mundo,
un día se borrará.
(*) A excepción de una parte de una linea que está marcada entre comillas.